Manifiesto médico contra las vacunaciones masivas

Habiendo transcurrido más de un siglo desde el primer Manifiesto Médico contra la vacunación (antivariólica) elaborado y firmado por prestigiosos médicos alemanes de finales del siglo pasado…

Los médicos firmantes declaramos hoy que:

 

1 Pese a las investigaciones realizadas hasta el presente el sistema inmunitario sigue siendo un gran desconocido para la Medicina. Aplicar la vacunoprofilaxis masivamente, es decir, infectar de modo artificial a la población, comporta riesgos notables y conocidos. Los frecuentes efectos adversos que origina esta práctica suelen ser minimizados o ignorados.

2 Los efectos yatrogénicos de la aplicación masiva e indiscriminada de la vacunoprofilaxis aparecen porque no se tiene en cuenta la reactividad individual de los antígenos, determinada por el bagaje genético -sistema HLA-, porque no se elabora previamente una anamnesis, ni se tiene en cuenta el grado de maduración del sistema inmunitario.

3 Las vacunas incluyen en su composición sustancias utilizadas como conservantes o como agentes de atenuación; algunas de tales sustancias resultan muy tóxicas para algunos individuos debido a que ejercen una poderosa acción alérgena.

4 La aplicación de la vacunoprofilaxis ha alcanzado unas dimensiones exageradas que no responden a la situación epidemiológica real del momento. Cabe suponer pues que hay otros factores que la sostienen, tales como la inercia burocrática de los programas de vacunación y la presión interesada que importantes sectores económicos ejercen sobre la Administración..

5 La disminución de las enfermedades infecciosas obedece principalmente a las mejoras obtenidas en nutrición, agua potable, separación y desinfección de aguas residuales e infraestructuras higiénicas. Resulta fácilmente constatable que la vacunoprofilaxis por sí sola es incapaz de hacer retroceder las enfermedades infecciosas en poblaciones desnutridas o que carecen de las mínimas condiciones higiénicas.

6 La aplicación innecesaria de antibioticoterapia, por desgracia tan frecuente, es una práctica demasiado arriesgada, dado que está provocando un incremento progresivo de resistencias bacterianas.

Por eso pedimos a las autoridades sanitarias, tanto estatales como autonómica:

 

1 Que se proceda a una revisión de los calendarios vacunales, y se abandone la práctica de la profilaxis masiva, indiscriminada e innecesaria.

2 Que se proceda a un seguimiento adecuado y fidedigno de los daños postvacunales, dando para ello las adecuadas instrucciones al personal sanitario, principalmente a los especialistas en pediatría, y concediendo a este tipo de patología la suficiente importancia en los medios académicos y formativos.

3 Que se respete la legislación vigente en cuanto al derecho de las personas a negarse a recibir un tratamiento.

 

Más información:

Para cualquier información médica sobre la Liga para la Libertad de Vacunación nos puedes escribir a la siguiente dirección infomedica@vacunacionlibre.org